Data analytics para comprender y actuar en realidades complejas

Finaliza un año más en esta década de aceleración de cambios tan propia del Siglo 21. Un año de hallazgos, innovaciones, hibridaciones y una enorme mezcla de elementos y sensaciones configurando nuestras realidades cada vez más complejas. Vivimos, aprendemos, nos relacionamos, producimos, en el marco de realidades cada vez más complejas, signadas por la mezcla entre humanidades y tecnologías, por voces múltiples cada vez más empoderadas y las fuerzas del cambio y la innovación que todo lo impactan.

Emerge con fuerza una condición que penetra transversalmente en todos nosotros: cierta disonancia cognitiva que experimentamos al no poder seguir la velocidad del cambio, especialmente tecnológico. Nuestra capacidad de comprensión y de acción se ven desbordadas frente a todo lo que la vida nos pone por delante bajo esta velocidad inusitada. Y claramente ello impacta en nuestros estados de ánimo. Encuestas e investigaciones de todo tipo dan cuenta del malestar, la incertidumbre y los miedos con los que transitamos nuestros días, paradójicamente en la época de mayor confort y opulencia de la historia de la Humanidad.

Las herramientas y metodologías para afrontar estos desafíos: Data analytics

Entre las cosas que podemos hacer para afrontar esta hiper-complejidad que crece en nuestros asuntos, sin lugar a dudas, aparece el renovado mundo de la data analytics: disponemos de herramientas y metodologías para generar más y mejores tableros de datos sobre distintas situaciones y realidades que nos permitan analizar, relacionar y pensar mejor. 

Nuestras vidas, emociones, acciones y relaciones dejan registros esperando ser capturados y entendidos dentro de los marcos legales y tecnológicos posibles para ampliar miradas y conocimientos que ayudan a estar y actuar eficazmente en mercados y sociedades. La escucha social (Social Listening) y otras modalidades para capturar datos y construir reportes de valor forma parte de este arsenal de herramientas de las que podemos servirnos para afrontar la complejidad.

Pero es momento de advertir y aceptar que no se trata de una tarea sencilla ni automática. La industria de la data analytics se sirve de la tecnología y capitaliza los beneficios de la automatización. Pero el trabajo humano calificado sigue siendo decisivo para construir estudios y reportes con sentido, capaces de agregar valor a quienes deben comprender y tomar decisiones en aquellos escenarios de complejidad que hablábamos arriba.

Se trata de skills y sensibilidades que se requiere desarrollar. Plantear hipótesis, proponer preguntas que abren caminos, indagar en elementos que subyacen a aquello que suele ser más visible, detectar conexiones entre partes de un todo, profundizar la mirada analítica, son expresiones de ese dominio que cobra creciente valor para aprovechar en serio este insumo que históricamente hemos descuidado y desatendido: los datos.

La tecnología, una aliada imprescindible

La ciencia ha sido fundamental para el avance de la Humanidad. Llegamos a conocimiento científico cuando el mismo está validado y probado. Ello abre un mundo de nuevas soluciones y tecnologías para dolores y problemas de personas, familias y organizaciones. Pero para llegar a ello hace falta siempre el ciclo de aproximaciones sucesivas: plantear hipótesis, recoger datos y construir pequeñas victorias en nuestra siembre inacabada e imperfecta comprensión de la realidad. Por ello, el mundo de los datos y de la escucha social en particular aparecen fundamentales en nuestro tiempo:

• Amplifican nuestras miradas,
• desprenden hipótesis para utilizar en investigaciones más profundas
• nos permiten adentrarnos en detalles y aspectos que muchas veces parecen imperceptibles en los análisis más globales y holísticos.

Hablamos del Marketing 5.0

Las empresas y organizaciones en general no podrán tener éxito en mercados cada vez más complejos y cambiantes si no abrazan con convicción e inteligencia, lo que el Philip Kotler denomina el marketing 5.0, que básicamente es el sistema de vinculación entre ofertas y demandas que hace máximo uso de datos y tecnologías digitales.

Asumir la responsabilidad por funcionar y tomar decisiones basadas en datos es un camino permanente que no termina nunca. El gran activo, siempre en evolución, es diseñar y construir un ecosistema de datos en constante alimentación con todos aquellos componentes que impactan en nuestra actividad. La escucha social digital es un aporte significativo para dicho desafío.

Los temas sobre los que podemos saber más y que las voces en las plataformas digitales nos lo pueden aportar, son infinitos. Depende de cada industria, estrategia y prioridades. Pero puede haber hilos conductores de los que no convenga quedarnos afuera, hagamos lo que hagamos.

¿Como no saber más, por ejemplo, de que hábitos y disparadores contribuyen a bajar el malestar y ampliar las posibilidades de bienestar / felicidad de las personas? ¿Cómo privarnos de comprender mejor las combinaciones de realidades físicas y virtuales que van eligiendo las personas en distintas sociedades y culturas en estos tiempos de hibridez y los que vienen tan asociados al metaverso? ¿Cómo no llevar un mejor seguimiento del avance del consumo responsable que crece en todos los sectores a partir de la mayor conciencia ambiental de los ciudadanos?  ¿Cómo no tentarnos en ver un poco más acerca del avance de la descentralización financiera, el auge del blockchain y la fluctuante realidad de las criptomonedas?

Data analytics para estrategias de acción

En fin, la lista puede ser infinita. Pero refleja una misma sustancia: será muy costoso funcionar, en cualquier actividad y escala, sin hacer de los datos un componente central de las estrategias de acción. El dominio de tableros y reportes será una capacidad que haga la diferencia en entornos cada vez más competitivos. Asumir la complejidad de nuestras realidades, ampliar nuestras maneras de comprenderlas a través de los datos y desarrollar músculo para actuar y comunicar de manera simple será uno de los mantras del Siglo 21.