Tiempo de lectura aprox: 3 minutos, 7 segundos
Descubre los métodos más relevantes para definir los objetivos de tus proyectos
No podemos comenzar ningún proyecto en nuestros negocios sin definir objetivos, eso está claro. Los objetivos son un recurso básico dentro de un plan estratégico, sin ellos no podremos definir con claridad ni precisión ningún proceso. Recordemos que el objetivo es aquella finalidad que perseguiremos, mientras que la estrategia estará conformada por aquellos métodos, técnicas y recursos que emplearemos para alcanzar el objetivo planteado:
“Un objetivo es el fin que se quiere alcanzar y al cual se dirige una acción” (RAE).
Así escrito y conceptualizado suena muy fácil y bonito, pero sabemos que definirlos nunca ha sido un trabajo sencillo. Claro, establecer los objetivos de cualquier acción de marketing, ventas, cuentas, etc; implica saber hacia dónde encaminaremos nuestras acciones y recursos. De ellos dependerá el éxito o fracaso de nuestra estrategia.
Existen diferentes métodos que te ayudarán a definir tus objetivos: SMART, GROW, PURE, CLEAR, entre otros. En esta nota te contaremos qué implica cada sigla de sus nombres para que puedas reconocer cuál se ajusta mejor a la realidad de tu compañía, a su misión y a su visión.
Método SMART para definir objetivos
Seguramente te sonará pues es uno de los más populares en la actualidad. Se fundamenta en la construcción de objetivos que ayuden a las compañías a acercarse a los resultados que esperan y a medir su rendimiento de forma más fácil.
Esta técnica para definir objetivos no recibe su nombre sólo por el significado de la palabra SMART (inteligente en inglés), sino que es una forma nemotécnica de recordar las características que lo componen, como en cada método que veremos a continuación.
S de Specific (Específico): El objetivo debe ser lo suficientemente detallado y concreto, de modo tal que nos permita generar objetivos secundarios que nos ayuden a especificar cada respuesta que debe brindar nuestro proyecto. La consecución de estos nos acercará a lograr el objetivo principal.
M de Measurable (Medible): El objetivo debe permitirnos elegir un indicador que nos facilite su seguimiento y avance en el proyecto. Este atributo puede ser cuantitativo o cualitativo, lo relevante es que nos ayude a obtener datos reales de nuestras acciones.
A de Achievable (Realizable): Los objetivos tienen que ser coherentes con la realidad de la empresa y su entorno, en otras palabras, deben ser realistas y alcanzables en el tiempo.
R de Result-based (Orientado a los resultados): Los objetivos orientados a los resultados son aquellos que son cercanos a la misión y visión de la empresa, están orientados a avanzar en ese camino y obtener resultados específicos, reales, que contribuyan a la empresa.
T de Time-related (Oportuno): Los objetivos deben poder realizarse dentro de un lapso de tiempo establecido, con fechas específicas y plazos de entrega, de esta forma los esfuerzos de la compañía no se desviarán en ese período.
Método GROW para lograr los objetivos
Este método es empleado por el coach John Witmore y está más orientado al logro del objetivo que a su definición:
G de Goal (Objetivos): El objetivo debe ser definido minuciosamente.
R de Reality (Realidad): Tras definir el objetivo, es importante que reflexiones y analices la situación inicial del proyecto.
O de Options (Opciones): Define con qué recursos y posibilidades cuentas o podrías contar para alcanzar los objetivos.
W de Will (Deseo): Establece cuál es ese deseo que motiva tu empresa a alcanzar el objetivo planteado. El compromiso es un factor inexcusable para este método, pues de no contar con una motivación lo suficientemente fuerte, el objetivo quedará en el papel.
Método PURE
Este método es más pragmático y se basa principalmente en la ética del proyecto a partir de una perspectiva más filosófica.
P de Positive (Positivo): El objetivo debe estar enfocado en lo que se quiere lograr y no en lo que se quiere evitar. Redactado en positivo será mucho más motivador y constructiva para el equipo de trabajo.
U de Understood (Comprensible): El objetivo debe ser conciso, claro y comprensible para todo el equipo de trabajo. No podemos alcanzar una meta si no todos entendemos hacia dónde va.
R de Relevant (Relevante): El objetivo debe estar relacionado con la circunstancia que afronta tu empresa a diario, no puede ser externo a ella pues no serían cercanos ni próximos para alcanzar. En otras palabras, si no entiendes la situación actual de tu compañía, no podrás definir un objetivo que sea relevante para su proyección.
E de Ethical (Ético): Cada vez más empresas se comprometen con objetivos orientados a lograr impacto positivo en el entorno.
Te puede interesar: Establece los KPI’s de tu estrategia social
Método CLEAR
Este método, como el anterior, se ajusta más a organizaciones preocupadas por el impacto que realizan en su entorno:
C de Challenging (Desafiante): El objetivo debe tener un gran valor para el proyecto y exigir un gran esfuerzo.
L de Legal (Legal): El objetivo debe sostenerse en un marco legal dentro del cual se desarrollarán las acciones para lograrlo.
E de Enviromentally sound (Respetuoso con el medio ambiente): Muy similar al método anterior, el objetivo debe ser respetuoso con el entorno.
A de Aprpropriate (Apropiado): Los objetivos válidos siempre son coherentes, los unos con los otros y apropiados para la realidad actual de la compañía.
R de Refinable (Optimizable): Debe poder cambiar en el tiempo para ajustarse a la actualidad de la empresa vigentes y acorde con la evolución del mercado.
Mide tus resultados con TopicFlower
¿Qué método te gustó más? ¿Cuál es el más aplicable a tu proyecto? Cuéntanos